Yo salí del baño y
avergonzada dije –Ya no eres el mismo... El se dio media vuelta y me dijo
–África, te quiero, yo
no quiero hacerte daño no quiero meterte en mi mierda de vida…
-Tu vida no es una
mierda
-No lo es si estas tu…
-Te quiero.
En ese momento nos
quedamos en silencio y nos besamos yo le dije al odio –Tenemos una cosa
pendiente ¿No?
-El sonrío y me dio un
beso en la mejilla, un beso dulce y con ternura
-Escapémonos ahora
-¿Ahora?
-¿Por qué no? África
de lo único que tengo ganas es de estar contigo, vayámonos ahora
-¡Vámonos!
Willy me llevo a casa
me duche y me puse unos pitillos tejanos cómodos con una camiseta de la Betty
Boo de manga corta con unos botines negros me planche el pelo y me puse un lazo
de color blanco, volví a colocar mi maleta en su coche, paramos en su casa y
cogió sus cosas. Me puso una venda en los ojos para que no pueda ver, llegamos
a nuestro destino, olía el mar y caminaba por la arena estábamos en la playa el
me saco la venda de los ojos, vi una casa preciosa de color blanco.
Me besó en el cuello, me acarició y con
cuidado me quito la camiseta y no té como mi pantalón caía lentamente, el se
quito la camiseta y yo con delicadez le desabroche el pantalón el me cogió en
brazos y me llevo al agua, me abrazó y me beso, volví a sentir ese placer que
sentí por primera vez. Me dijo bajito y al odio: -África, te amo, yo le bese.
En ese momento era la chica más feliz del mundo entero no podía parar de
sonreír, de reír, de besarle y de
decirle lo mucho que le quiero. Salimos del agua y nos pusimos el pijama vimos
una película de amor y nos dormimos abrazados. A la mañana siguiente me
levanté, el no estaba, había una de sus famosas notas: “Mi niña preciosa,
buenos días mi vida te he dejado el desayuno preparado tostadas y un zumo de
frutas, he ido a solucionar algunos problemas
estaré bien, llámame si quieres algo amor, Te amo cariño”. Desayune y me
fui a la ducha me puse un pantalón corto tejano con una camiseta marinera y
unas manoletinas blancas me rice el pelo y me puse dos clips blancos, me puse
un poco de gloss y me hice la raya, cogí el móvil, el ipod, dinero y las llaves
de casa, cogí el coche y fui a ver a Yoli y a Jessy para explicarles todo, en
cuanto las vi les di un gran abrazo, Yoli me dijo: -Me alegro de verte tan
feliz. Yo sonreí y le di un beso. Después de contárselo todo pedí un segundo a
solas con Jessy para hablar, ella me dijo que se alegraba por mi ya que era
feliz, cosa que ella no… Lucas no aparecía por ningún lado, estaba muy
preocupada, se había dado cuenta de cuánto le importaba me dijo que le había
llamado lo había buscado en todos los sitios posibles. Yo pensé:
-En todos no…
Lucas y yo siempre
quedábamos en un mirador con vistas preciosas, se veía todo chicago, el mar
calmado, y todos los preciosos edificios, cuando estábamos mal quedábamos,
llorábamos y hablábamos, subí a buscarlo, efectivamente allí estaba. Le
pregunté qué pasaba el muy triste me dijo:
-África me quiero
morir, no aguanto más… Mi vida es una mierda, te quiero a ti, la quiero a ella,
y os he perdido a las dos, ella no me quiere y tu aún menos.
-¡Para, Pon el freno!
¿Qué Jessy no sabe a quién quiere? ¿Te quiere a ti, sabes porque estoy aquí ahora mismo?
-¿Por qué?
-Porque Jessy me ha
pedido que te busque, está fatal… No sabe donde estas lleva des de que has
desaparecido buscándote ¿y tú vas diciendo que no te quiere? Que equivocado
estás…
-¿Así?
-Sí, Así que corre,
baja, abrázala, bésala y dile lo mucho que la quieres
-¿Y tú qué?
-¿Yo qué de qué?
-Eres mi mejor amiga,
y no te hagas la idea de que ya me olvidado de ti
-Ni yo de ti Lucas,
pero empecemos a vivir cada uno su cuento, ¿Amigos?
-¡Amigos!
-África…
-¿Si?
-Gracias por todo en
serio, siempre estás ahí
-Y siempre voy a
estarlo, ¡Y de gracias nada! ¡Corre a decirle cuanto la quieres!
Lucas bajo corriendo a
buscar a Jessy, la abrazó y la beso y le dijo al odio lo mucho que la quiere.